Los trabajadores de la minera Escondida siguen en huelga, la que ha sido organizada y ellos han pronosticado que pueden seguirla sosteniendo durante bastante tiempo.
En conversación con Expreso Bío Bío, Luis Lizama socio de Lizama y Cia miembro del comité laboral de la Sofofa y profesor de derecho del trabajo de la Universidad de Chile, comentó que los trabajadores están negociando conforme a la ley vigente, ya que el 1 de abril entra en vigencia la reforma.
“Esta es una huelga que por lo menos durante dos semanas va a ser una en la que el empleador no tendrá la posibilidad de reemplazar a huelguista con un trabajador (…) ni va a a ser posible que un trabajador se descuelgue de la huelga”, explicó.
Además, señaló que la movilización según han señalado no pasa por un tema dinero,bonos o incentivos si no que quieren establecer que no hay trabajadores de distinto tipo y que se extiendan también los beneficios a los trabajadores nuevos.
“Desde el punto de vista de la actual regulación es un punto que puede ser objeto de negociación entre las partes, esto es establecer regímenes laborales distintos para trabajadores según la época en la que son incorporados a la compañía. Indudablemente que Escondida lo que está privilegiando es tener un conjunto de beneficios laborales más flexibles y probablemente más bajo para el número de trabajadores”, indicó.
Pese a que la reforma entra vigencia el primero de abril de este año, Lizama argumentó que “el proceso queda regulado por la oportunidad en que se inicia, si el proceso se inició bajo la ley antigua, se regula por al ley antigua hasta el final, así pasen seis meses de huelga”.
Por otro lado, expresó que “la brecha entre lo que piden los trabajadores y lo que ofrece la empresa es demasiado alta, pensemos en que no hay incremento real de sueldo base por el lado de la empresa y un 7 % está pidiendo el sindicato”.
“En el tema de los bono ocho millones de pesos líquidos es lo que ofrece el empleador a cuatro años y lo que están solicitando los trabajadores es 25 millones a tres años”.
En esta línea, sostuvo que ve “bien difícil de que alguien con estas posiciones tan polarizadas, tan radicalmente distintas pueda ceder de una forma tan brutal en un periodo breve”.
“Creo que en definitiva es una huelga muy larga”, puntualizó.
Además, manifestó que esta huelga de Escondida va a marcar el modo en que se van abordar los conflictos de aquí en el futuro en Chile.
“Aquí no va a ser cuánto cuesta reemplazar a un trabajador por otro de mercado, o cuánto me pegan a mí en una empresa de la competencia por hacer lo que haga para mi empleador, si no que el tono va a ser la capacidad de presión de los trabajadores de hacerle daño al empleador mediante la huelga”, precisó.
Fuente: Bio Bio