La idea propuesta en el mundo político de modificar el royalty minero, gravamen que se debe pagar por concepto de extracción de minerales, o que la industria del cobre colabore con US$ 1.500 millones para financiar parte de las demandas ciudadanas como la condonación del CAE, generó reacciones que no se hicieron esperar dentro del gremio.
Uno de los que salió a dar su punto de vista, fue el presidente ejecutivo del Consejo Minero, Joaquín Villarino, gremio que agrupa a un gran número de empresas privadas y de la estatal Codelco, quien consultado por emol.com manifestó, “La minería está disponible para aportar a la agenda social que se defina, pero si ya pagamos impuestos entre los más altos del país no vemos razones para que se nos cargue especialmente la mano”.
Por otro lado, en el mismo medio online, el ex presidente de Codelco, Óscar Landerretche, sostuvo que “en general creo que es una mala práctica asociar gastos específicos del estado con impuestos específicos. Me parece que no es una buena idea”.
En tanto, el presidente de la Sofofa, Bernardo Larraín declaró que, “no me parece razonable estar apuntando con el dedo a una industria específica para en el fondo financiar una agenda social cuya principal fuente de financiamiento es básicamente que e país vuelva a recuperar el dinamismo”.
A su vez, el Ministro de Hacienda, Ignacio Briones, señaló que aumentar el royalty minero no parece una opción “No está en nuestro paquete tributario” agregando que “existe una ley de donaciones al fisco que cualquier actor o empresa, incluyendo el sector minero, puede aportar. Ese instrumento ya está disponible”, concluyó la autoridad de gobierno.
El presidente de la Federación Minera de Chile, Gustavo Tapia Campos, en una video-entrevista realizada el 25 de noviembre por el Área de Comunicaciones de la FMC ya dejaba en claro el punto de vista que tendría la multisindical, frente a este tema, planteando que una de las salidas a la crisis social pasa por exigir mayores tributaciones a las empresas mineras. Nuevamente en conversación con el titular de la FMC da sus apreciaciones ahora frente a estas declaraciones.
¿Cuál es el rol que debe desempeñar la minería en el actual contexto de Crisis Social?
La minería debe estar al servicio de las demandas sociales, ese es el fundamento de la concesión que hace el Estado a los particulares de la riqueza del subsuelo. Esto se ha debatido internamente por los sindicatos que componen la Federación y existe un amplio y profundo consenso con ello.
¿Es el aumento de los impuestos específicos a la minería la solución?
El aumento del Royalty y un aporte directo de la minería privada a las demandas sociales, producirán solo soluciones de parche. La alternativa estructural y de fondo es el fin de las concesiones privadas de las grandes mineras y la explotación de estos yacimientos por parte del Estado o sus empresas, sea de forma independiente o en asociación con privados, utilizando un modelo semejante a los que operan respecto a los hidrocarburos o el litio.
¿Cree que este gobierno está en condiciones de aplicar estas reformas de fondo? Considerando que el ministro Briones señaló que existen mecanismos en la legislación para recibir donaciones.
A este gobierno no se le puede pedir ninguna reforma estructural, en materia tributaria son tan intensos sus compromisos con el empresariado que sería iluso pedirles. El ministro Briones haciendo gala de su candidez, utiliza una versión revolucionada de los bingos para resolver los problemas de educación o salud, la ley de donaciones. De hecho, no descarto y sería bueno plantear que la minería como primer aporte debiera colaborar para financiar la condonación del CAE y después enfocarse en las demás demandas. Pero me parece una muy buena señal de que realmente entienden que se necesita un mayor aporte con un “mix de impuestos” que puede venir del empresariado como del gremio, ya que en lo que respecta al gobierno, ayer éste cerró la puerta al tema.
¿Por qué un aumento del royalty sería insuficiente?
La opción del royalty debe ser en subsidio de la intervención directa del Estado en la gran minería a través de Codelco o asociaciones públicas privadas a través de contratos especiales de operación. En caso que no existiera otra opción que aumentar el royalty, éste debe a lo menos duplicarse y la tasa de tributación efectiva ser a lo menos la que tiene Australia, de cualquier forma a lo menos la mitad de un futuro aumento del royalty debe quedar inmediatamente en las regiones mineras. En 2015 las mineras pagaron $3.500 (4,5 dólares) por tonelada, además de ser un aporte ofensivo es un tributo cíclico, un traje de baño para un día temporal.
¿Pero, es este un momento para aplicar medidas como estas?
Durante el súper ciclo del cobre, las vacas gordas pasaron sin mirar, favoreciendo sólo a las transnacionales o al ejército, no a los chilenos y sus necesidades, con el pretexto del empleo se les permitió operar sin restricciones. La minería no es una actividad más, su relevancia económica la hace peculiar, durante años el pretexto para su operación incondicional fue el empleo, pero ahora nos prometen una automatización extrema, ¿De qué le sirve la gran minería a Chile sino produce empleo ni aporta significativamente con una tasa tributaria progresiva que captura la renta económica?.
¿Ud. piensa que la solución debe ser estructural, institucional?
La solución de los aportes de la minería debe ser institucional, en el nivel constitucional terminando con la libre concesibilidad de la gran minería y derogando la LOC de Concesiones Mineras. En este entendido, consideramos determinante la intervención en el proceso constituyente por lo que nos hemos comprometido completamente en la organización de cabildos mineros.
Federación Minera de Chile