PwC Mine 2017 mostró que gran parte de las empresas postergaron sus decisiones de inversión a la espera de mejores precios y de mayor estabilidad.

Un 2017 volátil, pero con oportunidades para definir estrategias y atraer nuevamente la inversión al sector minero es una de las principales conclusiones de algunos expertos tras la entrega del estudio PwC Mine 2017.

El informe mostró que gran parte de las empresas postergaron sus decisiones de inversión a la espera de mejores precios y de mayor estabilidad, lo que se tradujo -en el caso chileno- en la reducción  a casi a la mitad de la cartera de proyectos: desde US$113.500 millones en 2013 a US$49.000 millones en 2016.

“Tendremos un 2017 marcado por la volatilidad y esperamos en 2018 y 2019 observar mayores precios del cobre y debemos estar preparados para atraer la inversión”, señaló Álvaro Merino, gerente de Estudios de la Sociedad Nacional de Minería (Sonami).

Para esto, dijo Merino, es necesario agilizar la tramitación de permisos y despejar la incertidumbre siendo capaces de “explicitar a los agentes económicos, en forma nítida y clara, la ruta a seguir para el desarrollo de Chile. “Es muy relevante poner nuevamente la inversión y el crecimiento en el centro de las políticas públicas”, puntualizó.

Una mirada similar tiene el académico Gustavo Lagos, quien señaló que las grandes compañías, a excepción de las chinas, siguen en compás de espera y sin tomar estrategias claras a seguir, lo que abre la posibilidad de volver a traerlas.

“La industria está esperando mejores precio, pero también definiciones políticas. Mientras no hayan definiciones claras, no habrá inversiones mineras”, sostuvo.

Lagos también reconoció que el estudio de PwC identifica enormes posibilidades para la producción de litio y cobalto, ambas impulsadas por la demanda la industria automotriz, tecnológica y energética.

En tanto, Jorge Cantallopts, director de Estudios de Cochilco, reconoció que los presupuestos de exploración están apostando por la seguridad en inversión y las empresas están mirando a Canadá, Australia o Estados Unidos.

A su juicio, en estos lugares existe un rol activo del Estado, con una mirada estratégica especialmente en el sector minero.

“Algo hay que hacer para aumentar la seguridad en la inversión. Se necesitan definiciones claras -como en el tema de la propiedad minera- para evitar que la exploración se concentre básicamente en empresas major y en brownfield”, puntualizó.

Fuente: MCh